DEL ÁRBOL
Soy morada del silencio
hebra con la que Dios
teje la noche.
Por mis venas viajan
innúmeros insectos
esos diminutos avatares
del tiempo que camina.
Cuando nadie me ve crezco
me multiplico
y me hago bosque
pentagrama de pájaros.
En mi abrazo se funden las criaturas:
el aliento de las bestias
el aleteo del colibrí
el sueño de los hombres.
Mis raíces saben hablar
con el vientre de la tierra
y vuelven a lo alto
con un puñado de misterio
entre los dedos:
El alfabeto de los gnomos
la cifra de la alquimia.
Cada mil años- en plenilunio-
una gota de lluvia posada en una de mis hojas
refleja la totalidad del universo.
Dura un segundo
pero quienes contemplan el milagro
son fulminados por la lucidez.
A veces
me doy en ofrenda a los hombres
y me hago libro
casa
barca
puente
hoguera
crucifijo.
Al final
saciado y ya sin fuerzas
me tiendo a dormir
y me hago polvo
gusano
tierra
mineral:
Alimento para otros árboles
y otros hombres.
Pereira, octubre de 2020. Año de la Peste.
PDT. les comparto enlace a la banda sonora de esta entrada
https://www.youtube.com/watch?v=z4UYX2qpUK0
Saludos nuevamente, amigo Gustavo. Por lo visto usted no se ha sometido al confinamiento ni un milímetro, por lo menos literariamente hablando. Qué tendrá este estado nuevo de cosas o ‘nueva normalidad’ a la que parece que tendremos que acostumbrarnos de aquí en adelante y que, en mi caso, no termina de arrancar y me tiene más o menos rebotando entre la desidia y la apatía, con episodios de insomnio incluso.
ResponderBorrarEn los ‘años de la peste’, que se caracterizan por una oscuridad galopante, sin embargo pueden ocurrir grandes avances o inspiradas reflexiones. Ya que estamos, precioso eso de “una gota de lluvia posada en una de mis hojas/ refleja la totalidad del universo”. Espero pasar más seguido por aquí y retomar el intercambio de opiniones. Un abrazo.
Usted sabe que, con o sin peste, siempre será bienvenido por estos pagos, apreciado José. Sus reflexiones constituyen un valioso aporte a este diálogo, que es la razón de ser del blog.
BorrarPD. Que siga galopando la Peste.
ResponderBorrarApreciado Gustavo.
ResponderBorrarImpecable su visión sobre el ahora y el después de "la pandemia". Nuestra estrechez mental siempre nos hará maleables, para obedecer las consignas, Desde la Inquisición, hasta la terrible época de Stalin, y de todos esos regímenes,desde Cuba, pasando por Mao y sus enfebrecidos proletarios, hasta el Macartismo: Ser el espía del vecino, denunciar, erigirse en defensor de las estrechas creencias del gobernarte de Turno!! Qué peligro!! Espero que no lleguemos a mirarnos en esos espejos, que aunque la historia condene, parece que siguen vigentes, escondidos bajo la aparente libertad(a cuenta-gotas) de esta modernidad que ya no se puede frenar. Hermoso su poema sobre el árbol. Le enviaré uno mío sobre ese hermano árbol, que tiene nuestro mismo ADN, según Carl Sagan. Olga Lucía Betancourt
Mi querida Olga Lucía : desde la mística, san Francisco de Asís se adelantó a la genética cuando habló de " Hermanos lobos, hermanos hombres, hermanos gusanos". ¡Qué clarividencia, Dios mío!.
ResponderBorrarY sí: todos estos controles de las cuarentenas son apenas una muestra de los peligros que nos acechan desde los grandes poderes que controlan el mundo.
Como siempre, es muy grato tenerla por aquí.
Un abrazo y hablamos.
Gustavo
Mi querida Olga Lucía : desde la mística, san Francisco de Asís se adelantó a la genética cuando habló de " Hermanos lobos, hermanos hombres, hermanos gusanos". ¡Qué clarividencia, Dios mío!.
ResponderBorrarY sí: todos estos controles de las cuarentenas son apenas una muestra de los peligros que nos acechan desde los grandes poderes que controlan el mundo.
Como siempre, es muy grato tenerla por aquí.
Un abrazo y hablamos.
Gustavo