martes, 19 de marzo de 2024

Por estas calles: las crónicas del otro Molano

 



¿Qué une los destinos de un músico de Heavy Metal sordo, un peluquero del “Parque de La  Libertad”, un vendedor de discos de  vinilo y un grupo de gaiteros que animan el aire de Pereira con ritmos heredados de viejas sangres africanas?

Responder esa pregunta es el propósito de la selección de textos que, en poco más de un centenar de páginas, nos propone el periodista Franklin Molano Gaona en su libro  Crónicas desde la Querendona, Lugares y voces, publicado en formato digital por la Fundación Universitaria del Área Andina.

Bueno, el subtítulo de Lugares y voces nos da la primera clave. El cronista nos propone un mapa narrado en el que un despliegue de voces y rostros nos permite aproximarnos al palpitante día a día de una ciudad que algunos definen como “diversa y libre” en un intento por aprehender algo del incesante tumulto en el que se mueven quienes la habitan.

Ese tumulto que llevó a Luis Carlos González, poeta oficial de la ciudad, a resumir su esencia en una frase que no tardó en devenir mensaje publicitario: “Querendona, trasnochadora y morena”. Molano se lanza a las calles y recorre sus rincones en un viaje de ida y vuelta del que regresa cargado de imágenes, de voces, de colores, olores y sabores. Con esos ingredientes cuece para el lector una serie de relatos que dan cuenta de lo que han sido los cambios y las constantes de una ciudad agitada por múltiples violencias, por sucesivas corrientes migratorias hacia distintos lugares del mundo y, sobre todo, por su decisión irrevocable de bailar hasta el amanecer como única manera de conjurar el infortunio.




De esos ingredientes tenemos noticias desde los tiempos de la violencia entre liberales y conservadores, del éxodo temprano hacia Estados Unidos y de sitios de baile tan legendarios como el Dancing, precursor de los que décadas más tarde se convertirían en foco de atracción para rumberos de todos los rincones del país.

Si el escritor argentino Tomás Eloy Martínez definió al cronista como “El sismógrafo de una sociedad”, podemos decir que Franklin Molano tiene sus instrumentos bien afinados para captar dónde están las historias y sus protagonistas. Lo sabe cuando acampa en el aeropuerto “Matecaña” para registrar los momentos de nostalgia, de dicha o desasosiego de las familias  empeñadas en recibir o despedir con canciones de Vicente Fernández a sus parientes que viven en el exterior.

Lo sabe muy bien cuando escoge el parque del barrio Providencia para tomarle el pulso a ese lugar que durante muchos años permaneció aislado del centro de Pereira por extensos potreros y permitió, entre otras cosas el surgimiento de la leyenda del “ Papa Negro”, encarnado en la figura del poeta Héctor Éscobar Gutiérrez, muerto en olor de santidad en medio del fervoroso tributo de sus seguidores.

 Sin una buena dosis de poesía, la crónica no pasará de ser simple recuento de datos al modo de un registro notarial. No por casualidad en el texto de entrada aparecen unos versos de Ramón López Velarde, uno de los grandes de la poesía en lengua castellana.  Tampoco es azar que en la crónica   sobre los discos de vinilo sobrevuele la belleza de esas voces y ritmos que entre  la bruma borrosa de las pastas rayadas nos traen noticias de otros tiempos.




Siguiendo el trazado de ese mapa, en las páginas del  libro también hay tiempo para el circo y lo que eso supone como regreso a una parte de nuestra historia personal; para proyectos culturales  como “La Cuadra” que dejaron su impronta en la reciente historia de Pereira; para un tributo  a la memoria del poeta Giovanny Gómez; para una inmersión en el frenesí de las personas que en el ajetreo del mediodía se ganan la  vida entregando almuerzos a domicilio y para un viaje al fondo de los claroscuros del "Parque de La Libertad" durante una jornada completa.

“Por estas calles la compasión ya no aparece/ y la piedad hace rato que se fue de viaje”, canta el músico venezolano Yordano  en una de sus tonadas más conocidas. Sin embargo, compasión es lo que le sobra  al cronista Franklin Molano. Compasión para meterse en la piel de  los otros y  para regresar a contarnos lo irrepetible de su aventura vital.


PDT. les comparo enlace a la band sonora de esta entrada
https://www.youtube.com/watch?v=Am3oIVMcJ_Q

 

2 comentarios:

  1. Excelente reseña, profesor Gustavo, acerca del libro de crónicas del periodista Franklin Molano. La verdad es que motiva a leerlo desde el mismo instante en que usted nos refiere la relación que liga a los diversos, pintorescos, o cotidianos seres congregados en una ciudad en constante ebullición como "la Querendona". Ese mapa narrado a través de las historias de los personajes que el cronista ausculta es una de las pistas determinantes para aproximarnos a la realidad social de una comunidad pereirana cuyos miembros experimentan, cada uno a su manera, sus propias vivencias personales, tan diferentes entre sí y a la vez tan cercanas, pues todos están hermanados en ese mismo espacio de casi un millón de habitantes que los captura con su influjo.
    Felicitaciones y agradecimientos al periodista Franklin por este libro, que desde ya comienzo a leer. La Universidad Andina ha reservado un portal en la red en donde el libro se encuentra disponible totalmente gratuito para quienes estén interesados. Aquí el enlace. https://digitk.areandina.edu.co/bitstream/handle/areandina/5892/Cronicas%20desde%20La%20Querendona.pdf?sequence=5&isAllowed=y

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    1. Muchas gracias por el diálogo, Juan Felipe. No sé si conoce una crónica de Franklin titulada " Corocito Gourmet", publicada hace varios años en el desaparecido periódico Vecinos. Como podrá intuir, es un texto delicioso. Y el título... bueno, el título es como para robárselo.
      Y también mil gracias por compartir el enlace.
      Gustavo

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